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ELLOS NO USAN SMOKING
- ¡Anda, dímelo! - ¡No, ahora no!
- ¿Que és eso, mimosa? ¡Dímelo! - ¡Ya te dije que no!
¡No! ¡Mi guitarra no!
Es buena gente, compañero. Yo respondo por él.
¡Documentos!
No corras. Esa gente no piensa: dispara.
No se puede andar sin documentos. ¿Oíste, tonto?
Lugar de guitarrista es en el Nordeste. ¡Lárgate!
Vamos a hacer una parada en casa.
- Es tarde, Tião. - No... mañana es domingo.
Vamos a esperar que la situación se calme.
- ¡Allá se fué mi sandalia! - ¡Y los pantalones!
Hablar bajo, vas a despertar a todos.
No, ellos no se despiertan.
Es mejor que nos vayamos. Llévame a casa.
¿Para quedar enterrado en el barro?
- Doña Romana se enojará. - Vamos a esperar que pare la lluvia.
No sé porque te enojas.
Entonces, ¿me vas a contar ese secreto o no?
¿Me quieres? ¿De verdad?
Mimosa...
Sin ti no soy nada.
Habla bajo, que él se va a despertar.
¿Chiquiño? ¡Ni con una bomba!
Anda, dímelo.
Habla, ¿cuál es ese secreto?
Es una cosa muy seria, Tião.
Lo que quiero es que seas muy sincero conmigo.
¿Me amas de verdad? ¿Quieres vivir conmigo?
Te adoro, María.
¡Te juro que nunca sentí eso!
Vivo pensando en ti.
Yo también te quiero mucho. De verdad.
Habla... dime todo, mi amor.
Tião, escucha... yo...
- Es que... - ¡¿Estás embarazada?!
- ¡Loco! - ¿Un niño?
No juegues conmigo. Habla en serio, María.
- ¿Pero, es verdad? - Sí, vino el resultado de los análisis.
¿Y te pasaste el día entero sin decirme nada?
Yo tuve miedo. No quería que pensases que yo te obligo a casarte.
- No quiero obligarte a nada. - Oh, tontita...
fijamos la fecha del casamiento mañana mismo...
Porque si no después se va a notar y habrá problemas en tu casa.
Tendremos problemas si antes no nos comprometemos.
- Sería mejor comprometernos. - Espera. ¿De verdad quieres?
El hijo vino porque tenía que venir. Podríamos solucionarlo de otra manera.
Espera...
No pienses en eso...
Yo estaba esperando mejorar mi situación.
Lo que yo quería era vivir en un lugar mejor.
Siendo así, está bien.
No hay problemas, vas a apurar eso.
¿Estás contento?
Yo no quiero que te preocupes. Yo sólo quería vivir contigo.
Y vivirás. La fiesta de compromiso la haremos dentro de 2 semanas,
¿qué te parece?
¿No te dije que se iba a despertar?
Chiquiño, no es nada.
- ¿Uds. están ahí, eh? - Habla bajito,
que se va a despertar tu madre.
Estaba soñando con nuestro juego de los botones.
Seria lindo que vayas, Tião. Hice dos goles.
Duerme, sino viene la vieja y ya sabes lo que sucede.
Chiquiño, nos vamos a comprometer dentro de dos semanas.
- ¡Que bien! ¿Y cuándo se casan? - Pronto.
Yo también me voy a casar con la Teresita. No te mandes la parte.
Me voy a casa apenas entre en la fábrica.
- La fábrica no mantiene a nadie.. - Te mantiene a ti, a papá...
¿Por qué no me va a mantener a mí?
Ya es tarde, amor, vamos.
Vamos a esperar que pare la lluvia.
Mamá no deja comida ni para remedio.
Ella es divertida, ¿no? Riñe mucho, pero es graciosa.
Hoy quiso pegarme con la cuchara. Yo me agaché...
...y la cuchara se quebró. Mamá me insultaba e se reía.
Es mejor que te duermas, sino te van a dar una paliza.
¿Qué es eso?
Papá, estamos esperando que pare la lluvia.
- Buenas noches, Sr. Octavio. - Hola, muchacha.
- ¿Se mojaron mucho? - Si hasta me llené los pies de barro...
Es una vergüenza esos servicios pùblicos...
Aceras, sumideros, cañerías...
Ellos sólo piensan, porque en lo demás es solamente promesas.
Son unos sinvergüenzas.
Creí que estuvieses durmiendo. ¿En la juerga, padre?
¿Juerga? Juerga van a ver ellos en la fábrica.
Pueden aprovechar el paraguas. Está agujereado, pero sirve.
Son graciosos esos tipos.
Burlan la ley en muchísimas cosas, pero en la hora de pagar el aumento...
...ellos quieren apoyarse en la ley.
Vete preparando, Tião.
Si ellos siguen así, dentro de dos semanas...
...habrá una gran huelga.
Quiero ver si van a dar el aumento o no.
Si no pagan...!Huelga!
¡Así tiene que ser!
- ¿Vamos, María? - Sr. Octavio...
Tião decidió una cosa.
Vamos a comprometernos.
Dentro de dos semanas.
¿No estás medio apurado?
Es lo que queremos. Vamos hacerlo pronto.
Es una teoría. Es que nosotros... no tenemos...
...ningùn dinero.
Hay fiesta y yo no lo sabía.
Después no vengas a quejarse del reumatismo.
Mira, andando en la lluvia. Buscando jaleo.
Cuanto más el tiempo pasa, más bobo se vuelve.
¿Como estás, María? Es mejor que te vayas.
Dentro de un rato tu madre viene a buscarte.
¿Calma? ¿Qué calma?
¿Quién se levanta para hacer el desayuno, quién los despierta?
¿Qué jaleo es este?
La lluvia, madre. Papá llegó y estamos aquí conversando.
Van a comprometerse dentro de dos semanas.
¿Pero están todos locos?
¿No podías esperar hasta mañana para decirme esa tontería?
Perdona, María. No es contigo. Esos dos no piensan en nada.
Ellos llegan gritando, y la loca aquí...
...sin dormir, cocinando, trabajando, despertando para llamarlos.
¿Pero que noviazgo es ese?
Sí, decidimos comprometernos.
Dentro de dos semanas.
¿Estas son horas de fijar un compromiso?
Oí que hace poco estabas hablando de huelga.
Por Dios, Octavio, no te metas en confusión de nuevo.
Compromiso...
...huelga...! Y la burra aquí que se jorobe!
Yo también me voy a casar...
Quédate acostado, que no es de tu cuenta.
Es mejor que cada uno vaya para su cama.
Mañana hablaremos. No es nada contigo, María.
Es que esos dos son terribles.
Y deja ese aguardiente de porquería...
...que mañana tienes que levantarte temprano para arreglar el pozo.
Ella tiene razón, pobrecita. Mañana hablaremos mejor.
¿Dentro de dos semanas? Está bien, es la vida.
Broncas, compromiso, huelga...
Hasta mañana, muchacha. Lleven el paraguas.
No dijiste nada en todo el camino.
¿Estás preocupado por culpa del niño?
Soy capaz de entender. No quiero que te cases por obligación.
No es eso. Es lo de la fábrica, esa cosa de la huelga.
Siempre hay broncas.
- ¿Qué se pasa, María? - Abre, soy yo.
Eres pesada, María.
Estaba casi durmiendo.
Abre y ayùdame, que papá está en la sala.
Caray,
- mañana voy a querer más dinero. - Está bien.
Bueno, puedes soltarme. Gracias.
Duerme, hermanito, ya es tarde.
¡Cinco pesos, mañana!
¡Está bien!
Perdona, María, pero tù estás muy sabrosa.
Te rompo la cara, bribón.
Menos mal que me voy a ir de aquí.
¿Como estás, mamá?
Mejor... Tardaste, hija.
Por culpa de la lluvia. ¿Tomaste el remedio?
María, no sé que pensar.
No pienses, madre. Duerme.
Ud. necesita dormir.
Hasta mañana, mamá.
Que Dios te acompañe, hija.
¿Llegaste?
¿Piensas que no te vi?
¿Y entonces? ¿Te cansaste de refregar por ahí?
¿Jodiste mucho?
Necesitan de una paliza.
No sé porque no te pego.
Ven a la cama, Jurandir. Desconecta el televisor.
Parece que hoy habrá trompadas.
Duerme, Bié.
¿Necesitas de ayuda, mamá?
Vete, y no llegues atrasado para el almuerzo.
Tião, ¿vamos a jugar mano a mano?
¡Tonto! Ocùpate de tu novia.
Alípio, dame un aguardiente. Ya empezamos a temblar.
- ¿Soledad, compañero? - Vete a insultar a tu madre.
Ella está tan delicada hoy.
¿Por qué estás tan irritada?
No tengo ganas de bromas.
Bueno, ya no está aquí quien bromeó.
¿Puedo saber la razón de tu malhumor?
Estoy preocupado, estoy con la cabeza ardiente.
No vale la pena calentarse. Hay que aguantar.
¿Piensas que es fácil?
No vale de nada pensar mucho.
¡Ànimo, muchacho!
¿Estás enterado de los rumores de la huelga?
Ahorita estaba tu viejo en la plaza organizando un mitín.
El y Braulio estaban distribuyendo panfletos.
Hasta que no lo metan en la cárcel el viejo no va a parar.
El sabe lo que hace.
Y yo me jodo.
Es el colmo aguantar al Sr. Octavio.
Mira, um bocadillo... para engañar el estómago.
¿Más cerveza?
Alípio, dos aguardientes.
- ¡Despacio, hombre! - Alípio, no seas pesado.
Habla em serio.
Conversé con los tipos.
No hay dudas, la propuesta es buena.
Si no conseguimos un puesto en la Gerencia, vamos a ser encargados.
Sí, siempre son unos pesos más.
Sólo hay una condición: Que estemos al lado de ellos...
...vigilar el movimiento de los muchachos antes que explote.
¿Me entiendes?
¡Alcahuete!
¡Auxiliar de gerencia!
Eso no me agrada.
Esa gente parece que no ve. ¿No hicieron huelga el año pasado?
Ahora necesitan haber otra más y así nunca van a acabar.
Nosotros vivimos con la cuerda en el pescuezo, viejo.
Entonces, ¿qué haremos?
Lo mejor es estar al lado de quien manda.
No hay salida, son ellos quienes saben, Tião.
¿Sabes una cosa?
María va a tener un hijo mío.
¿Va a tener un hijo? ¡Estás bromeando!
María va a tener un hijo y me voy a casar dentro de un mes.
Te juro que me casaré con María y no la haré pasar necesidades.
Caray, Alípio. ¿Qué pasa? ¿Me traes la cerveza?
Espera, que estoy sirviendo a estos señores.
Pero, mi amigo, existe un problema.
Voy a ser franco contigo.
¿Sabes?, me da miedo el desprecio de los compañeros.
Sabes como es, ellos nos llaman: traidores.
La huelga es la defensa de un derecho.
Si no quieres usar ese derecho, nadie puede obligarte.
Es verdad. Cada uno se las arregla como puede.
Eso es verdad.
¿Pero tù vas a ser padre? ¡Tiene gracia!
¡Quien tiene gracia es tu madre!
- ¡Por fin, Alípio! - Ahí tienes, borrachos.
Mira, el tipo no sabe ni servir.
- Ahora yo quiero ver. - Vamos.
Se acabó la poesía, mimosa. Las cosas no caen del cielo.
- No necesitas enojarte por eso. - No estoy enojado, estoy preocupado.
Tengo que conseguir una casa y dinero para comprar las cosas...
- Tienes los ahorros del seguro social. - ¡Vaya con los ahorros que tenemos!
Deja, yo me las arreglo. Conseguiré dinero prestado.
Porque mi mujer va a tener un hijo bien nacido.
Con su habitación con florcitas y sapatitos azules en la puerta.
Será un hombre como yo, que vencerá en la vida.
¡Estás hechizado!
¿Vamos a pasar por la casa de Silene?
Ya es un poco tarde...
¿No quieres?
¡Pícara!
Tião, mi amor...
Un poquito más y vamos a poder estar juntos.
Yo hablo, hablo, y tù ni te enteras.
No seas pesada, María. Yo estoy bien aquí.
No, estás diferente.
¿Qué estás diciendo, consentida? Yo te amo mucho.
¿Te gusta?
¿Te gusta?
Aprovecha porque dentro de algùn tiempo...
SOCIEDAD VECINAL
¡Que reunioncita difícil!
Todos quieren solucionar la cuestión en el Sindicato.
Sartini y sus compañeros siempre la quieren ganar gritando.
¡Quieren aprobar la huelga prepotentemente!
Si Uds. van atrás de esos flojos, nunca conseguirán nada.
No tenemos condiciones ni siquiera de parar la Santa Marta.
El sindicato está en manos de los mafiosos.
Lo que nos debe interesar es que lo sueldos está disminuyendo.
El trabajador está en la miseria.
Estamos todos. El pueblo también está en la miseria.
Caray, ¿nos vamos a quedar en la pura charla? ¿Negociando?
¡Con las máquinas paradas! Es lo que el patrón entiende.
¿Estás haciendo un mitín, Sartini?
¿Y no es para hacerlo? Uds. están contra la huelga.
¡Estamos en contra de la irresponsabilidad!
Haremos la huelga, pero cuando los obreros la quieran.
¿Vas a decirme que los obreros no la quieren?
Están todos pasando hambre. La inflación los está consumiendo.
Sartini, basta, ya lo sabemos.
¿Mañana bajamos juntos?
Paso a buscarte.
¡Que susto, papá! ¿Qué estás haciendo en la oscuridad?
Estoy pensando, hija.
Es mejor que se acueste.
- Buenas noches. - Espera, hija.
Felicitaciones. Vas a casarte con un buen muchacho.
Ya lo sé.
Es en esto que yo estaba pensando.
Hace tiempo que nosotros no nos entendemos.
Olvida eso, papá. Vamos a terminar por entendernos.
Eso es lo que yo más quiero.
Aprovecho que hoy no estoy borracho para poder pensar.
Pasé la tarde y la noche entera sin beber.
Crisóstomo estuvo aquí. Me consiguió un trabajo.
Comienzo la semana que viene.
Eso es bueno. Así no se desespera.
Con ese trabajo yo estoy más tranquilo.
Quien sabe si así mejoramos.
La bebida también me perturbaba un poco.
¡Paré, hija! ¡Paré!
Estoy muy contenta, papá.
Ven, dale un abrazo a tu viejo.
Perdóname, hija. No siempre uno acierta, aùn queriéndolo.
No te pongas sentimental. Vate a dormir.
Voy a quedarme un poco más.
Es mejor pensar con la cabeza fría.
¿Qué hubo, papá? ¿Te expulsaron de casa?
Están durmiendo y yo estoy sin sueño.
Yo quería hablar contigo.
Cosas sin importancia. ¿Vamos a tomar unos tragos en lo de Alípio?
¡Mañana hay que trabajar!
¡Trabajar, trabajar! Sólo un traguito para equilibrar.
Alípio, ¿todavía hay tiempo para un traguito?
Está bien, vamos a entrar.
¿Qué quieren tomar?
Unas cervecitas.
No, a mí me hace mal, mejor una aguardiente, Alípio.
¿Y entonces? ¿Hiciste mucha subversión hoy?
Hicimos una buena reunión. Hasta hablé de ti.
¿Y a cambio de qué?
De haber sido obligado a dejarte...
...todo aquel tiempo viviendo con tus padrinos.
Creo que fué una experiencia que te mareó.
Quien cambia de casa, cambia de ideas.
¿Y yo qué podía hacer? Yo estaba en la cárcel y tu hermano era pequeño...
No era posible.
Cuando me casé con tu madre, yo estaba en una situación peor que la tuya.
Perseguido, desocupado...
Pero nosotros decidimos enfrentar y luchar.
También yo soy un hombre de lucha.
Tengo la impresión de que estás un poco perdido.
Si conversáramos más, quizás yo pudiera ayudarte.
Gracias, papá.
Pero creo que solamente yo puedo ayudarme.
A veces, tenemos un problema...
...y solamente vemos el problema, no vemos nada más.
Yo lo veo. Yo sé donde me aprietan los pantalones.
¿Lo sabes realmente?
¿Quieres apostar?
Dentro de algunos años hablaremos.
Vamos a dormir, papá.
El ùItimo traguito.
Que nadie se mueva o los quemo.
Alípio, escóndeme, la policía me está persiguiendo.
¿Y dónde carajo voy a esconderte?
¡Caray, escóndeme! Moriremos todos aquí,
pero esta vez no me llevan.
Huye por los fondos, cabrón, y salta el muro.
Vamos, que la cosa se está poniendo pesada.
Quédense, que la policía viene ahí.
¿Dónde está ese hijo de puta?
Nos amenazó con un arma y huyó por los fondos.
Quieto, mierda.
¡No piensen que esta vez me van a herir de nuevo!
¡Basta, hijos de puta! ¡Me hirieron, cagones!
No pueden hacer eso conmigo. Soy menor de edad.
Ahora es mejor salir. Porque voy a cerrar.
Llamaron a cinco. Se está rumoreando que hay despedidos.
Onofre, Mafra y Tito fueron despedidos.
Que ganamos organizándonos, si van a despedir a todos.
Hola, María, ¿te gustó el ajuar o no tuviste tiempo de verlo?
Me gustó mucho, después hablamos.
Despidieron a 3 de montaje. Dicen que van a despedir a muchos.
¿Tres?
Ni siquiera los dejaron entrar.
Los mandaron al departamento de personal.
Están despidiendo a los más conscientes.
Lo quieren es acabar con los líderes.
¡Carajo! Octavio, no pueden despedir así de esa manera.
Vamos a parar esa fábrica ahora mismo.
Tranquilo, italiano. No es así la cosa.
¿La cosa va a quedar así?
No... cálmate... todo el mundo para el trabajo.
Todos al trabajo.
Están queriendo que perdamos la cabeza.
Yo sé que hay alcahuetes.
¡También!
Sólo puede haber cosas despreciables.
Sí, despidieron a ocho.
¡Las puta que los parió!
Tião, te llaman de depto. de personal.
¿Y entonces?
¿Y entonces?
Yo soy quien pregunto.
¿Por qué te llamaron al depto. de personal?
Fuí a pedir un día libre para cuidar de mis cosas.
¿Te lo dieron?
Sí, mañana todo el día.
No te lo dije, los tipos simpatizan con tu cara.
Aprovecha ahora, dales una ayuda.
¿Qué ayuda?
Yo, por ejemplo... bueno, yo...
Ellos querían saber unos nombres... y yo hablé.
Yo hablé, porque sino ellos me iban a presionar.
Que canallada.
Inventa unos nombres, porque si no te van a presionar.
Por ejemplo, hay buenos nombres: Braulio, Octavio.
La vida no es como uno quiera que sea.
Esta en nuestra oportunidad. Hay que aprovecharla.
Un rebusque aquí, otro allá, y listo.
Tendrás escritorio y secretaria y nadie te preguntará como los conseguiste.
Puedes matar y robar y nadie te preguntará nada.
Y dirás: "Aproveché la ocasión, compañero".
Y algunos hasta llegaron a ser presidentes.
¡Coma, Sr. Presidente!
Echa un vistazo, está todos agachados.
Son un bando de flojos.
Disimula que está todo bien, que no sucede nada.
Despiden a los compañeros que luchan y nadie hace nada.
Están todos quietitos llenándose la panza.
Tranquilo, Sartini, que la situación está jodida.
Yo no lo trago a ese italiano.
Ni yo, es un pedante.
A mí me harían un favor si él fuese despedido. ¿No te parece?
¿Otra vez la sopa?
Doña Romana, yo no voy a querer.
¿Niña? Deja de tonterías.
Donde comen cuatro, comen cinco.
Mi madre dijo que no abusará de Ud.
Dile a tu madre que no sea imbécil.
Pobrecita, con aquella panza, cuidando de todo...
Vete a cenar. Pareces una caña delgada...
...y aùn te quedas sin comer.
¿Viste, Romana? Despidieron a ocho en la fábrica.
Eran los más combativos. Escogieron a dedo...
...los mejores de cada sector.
Ten cuidado, Octavio.
No me molestarán. Saben que tengo el apoyo de los demás.
No sé. Es mejor que usted tome cuidado.
Yo sé lo que hago.
Si Ud. pierde ese empleo, no será fácil conseguir otro.
Ten calma. Yo no soy ningùn bagazo.
Yo estoy habando para que Ud. tenga cuidado.
No va a ser fácil para mí mantener dos familias.
¿Quién está hablando de eso?
De mi profesión yo entiendo, soy un buen obrero.
A pesar de mis posiciones, siempre tuvo empleo.
No trabajé cuando estaba en la cárcel. Todos reconocen mi capacidad.
Papá, yo no estoy hablando de tu capacidad...
¡Te estás cagando de miedo!
Ese casamiento apurado, no voy a preguntar porque...
...te está dejando más nervioso. Pero no necesitas preocuparte.
Estoy aquí y no vas a tener que cuidar dos familias.
Si puedes, cuida de la tuya.
¡Basta, Octavio!
Yo no estoy nervioso.
Me da mucho coraje verte con una vida por delante...
...con miedo de su propia sombra y mirando para la punta del pie.
Levanta la cabeza, muchacho. Los tiempos son otros.
Tù creciste en plena dictadura. Pero pára y piensa un poco.
¡Basta, Octavio!
Vamos a comer en paz.
Estoy hablando justamente para que podamos vivir en paz.
¡Caray, más ánimo!
Los trabajadores se están organizando...
Es difícil... sí, es...
No es hora de pensar en perder o no perder el empleo.
Es hora de luchar. Vete allá, Tião.
Deberías asistir a las reuniones del sindicato para dar tus opiniones.
Convive más con tus compañeros. Mira, así acabas perdiendo...
...esa agonía que uno ve en tu ojos.
¿Que agonía? Déjame... Ni sé porque hablé...
Tienes miedo que sea preso, que pierda el empleo...
...y que estorbe tu vida y tu casamiento.
¡No es verdad!
¿De nuevo, Octavio? ¿Vas a comenzar todo otra vez?
Yo sé las cosas que pasé. Y no quiero pasarlas de nuevo.
¿Lo qué de nuevo, Romana?
Lo sé... 15 años de dictadura, es terrible... nos marcan.
¡Pero las cosas cambian!
¡Y tù piensas siempre como se nada cambiase!
Para ti no existe agua corriente, siempre es un pozo.
¡Necesitas ver el agua corriendo!
Agua corriendo, pozo de agua. Hablas como un loco, carajo.
Desde pequeño escucho esa charla e seguimos en la mierda.
¿Y yo soy el que no sabe ver? Ud. ve lo que quiere ver.
El día en que Ud. vea la verdad de las cosas...
...va a pegarse un tiro en la cabeza.
Porque Ud. es honesto y entenderá el daño que nos hizo...
...con esa alegría de "organizar a la clase obrera".
...y no sé que "histórico". ¡Siempre en la misma mierda!
En la cárcel, medio muerto. Trabajando en aquella fábrica.
Sin otro futuro que morir encima de aquel torno.
Tião, tù estás muy mal, ¿eh?
Mal un cuerno.
Mal un cuerno, ¿los sabe?
Estoy mejor que usted.
Yo veo la mierda en que estamos nosotros.
Pero Ud. dice que es bosta corriente, que pasa.
Hay que reforzar esa puerta... sino ella no aguanta.
¿Estás enfermo?
¿No fuiste a trabajar?
Me dieron el día para cuidar de mis asuntos.
A ver si hablas con tu padre.
Ayer lo ofendiste mucho.
El se enoja, ¿verdad? Ve todo bonito...
No se cuida. Se va a fastidiar y nosotros también.
Eres muy injusto con tu padre.
Quizás no lo soy.
Es verdad.
Bueno, después le pido perdón.
Eso mismo. Es muy feo la pelea de un hijo con un padre.
No quiero que suceda eso.
Cuidado. No compliques más lo que ya está complicado.
Deja de discordia, vieja.
¿Discordia?
¡Yo lo sé!
No se engaña al corazón de una madre...
Tres días, vas a conseguir. Mira, es Braulio.
Diálogo con patrón: máquinas paradas, producción parada.
Así ellos entienden nuestro lenguaje. Y no va a quedar así.
Esta vez te tocó a ti.
Y a dos más. Entiendo que me despidan, pero a aquellos desgraciados...
Ellos quieren probar que no están despidiendo solamente a los nuestros.
No me dejaron entrar ni para coger mis cosas. ¡Son unos hijos de puta!
Sartini, no te preocupes. Conseguirás un empleo fácil.
Bueno, no te preocupes.
Ustedes también serán despedidos. Todo el mundo.
Buenas noches.
Hace cuanto tiempo que no veo eso.
Afilando en el portal, a la moda antigua.
Ustedes son lindos.
Me voy a descansar. Para que mañana pueda estar bien.
Hija, mañana me sentiré un hombre ùtil.
Empezaré temprano en la obra.
- Muy bien, Sr. Jurandir. Felicitaciones. - Muchas gracias.
Hasta mañana.
No tardes, hija, que has dormido poco.
Dame un beso.
Buenos días, papá.
No lo vi ayer...
Estaba resolviendo el asunto de una casa y buscando dinero.
Me dieron un día libre en la fábrica...
Ya lo sé.
¿Lo sabes, papá?
No me hagas caso de lo que yo te dije.
Tiene razón, yo estoy medio perdido.
Yo tengo muchas responsabilidades.
Uno acaba diciendo lo que no piensa y a veces habla demasiado.
Como cuando está borracho.
No te preocupes.
Olvídate de eso.
Ya me olvidé.
Yo lo respeto... y lo admiro mucho.
Hace mucho tiempo que no escuchaba una declaración como esa.
La está escuchando ahora.
Eres un buen chico.
Calentón, pero un buen chico.
María está embarazada, ¿verdad?
Sí...
Yo estaba seguro.
¿Vienes conmigo?
Claro.
Es lindo ser abuelo.
El día fué muy bueno, pero estuve bastante tiempo parado y...
Estoy agotado.
Sr. Jurandir, ¿la viga puede ser refaccionada?
Sin duda.
La hendidura fué pequeña. Yo la arreglo.
La arregla mañana.
Escuche, sin querer abusar el primer día...
¿Me puede dar algùn dinero adelantado?
Es para pagar unas deudas. ¡Yo siempre pago lo que debo!
Yo le conseguiré. Hable conmigo a la salida del trabajo.
Muchas gracias.
Que pasa con tu padre que no llegó todavía.
Cuando él llegue me avisas, así sirvo la cena.
No hace falta. Vete a dormir, yo se la sirvo.
¡Claro que no! Llámame.
Está bien.
Vete a costar.
¿Pero por qué "Durval"?
Es bonito. ¿Por qué "Roberto" o "Antonio"?
Es para que nos entendamos bien...
Te gusta el hijo y al mismo tiempo no, ¿verdad?
Vamos a aclarar de una vez este asunto, amor mío.
Estoy feliz con Durval.
Adoro el nombre: Durval.
Pero Durval para mí era para dentro de unos dos o tres años,
pero el niño viene antes de lo que pensaba.
Lo que quiero decir, es que Durval está llegando a destiempo.
Pero está bien.
Ya que él está aquí...
...está bien. ¡Viva Durval!
Mira, aùn hay tiempo.
Si te va a dejar así, como estás...
...es mejor mandar a Durval de vuelta y esperar otro.
Si hablas de nuevo de abortar, me voy a enojar contigo.
Mi hijo está ahí y yo soy muy hombre para mantenerlo.
- No hables más de sacarlo, ¿entendiste? - Entendí.
Vas a ser un marido duro, ¿eh?
¡Quieto! ¡Es un asalto!
¿Qué pasa, compadre?
¡Es un asalto! ¡Manos arriba o te mato!
¿Por qué te ríes, otario? Acuéstate en el suelo.
Que tontería, compadre. Estás muy engañado conmigo.
Yo no tengo nada. Te garantizo que me gaste todo en aguardiente.
No te hagas el vivo. ¡Al suelo!
Mira, de mí solamente puedes llevar mi ropa, que está más vieja que yo.
Lo demás es pérdida de tiempo.
¿Estás pensando que yo soy un idiota?
Esto no es un juguete. ¡Yo te mato!
Te estoy avisando. Te engañas. Bùscate otro mejor.
¿Tu quieres morir, hijo de puta?
Olvida eso... vamos a dormir.
Liberaron el cuerpo solamente después de las 5 de la tarde.
Ahora todo será diferente.
- Hablaremos después. - Yo quiero hablar ahora mismo.
No podemos abandonar a mi madre y a Bié.
Si nos casamos, vamos a tener que vivir aquí...
...hasta que mi madre también se muera.
Sé que ella no va a aguantar mucho tiempo.
Después hay que cuidar de Bié.
Yo lo cuidé desde niño, cuando papá lo adoptó.
Ya lo sé.
No te preocupes, ángel mío.
Nos casaremos y vendremos a vivir aquí.
Yo no conseguí casa para nosotros.
Nos quedaremos aquí y cuidaremos de ellos.
¿Vamos a volver?
Sí, muchacha...
Vete con Tião hasta mi casa. Necesitas descansar un poco.
No. Quiero ver a mi padre.
Nunca lo vi bien a mi padre.
Que manera estùpida. Morir de esa manera, Dios mío.
Tião me está preocupando.
Tião se las arregla.
Todos pasamos por una cosa parecida, ¿verdad?
¿Sabes una cosa, Octavio?
Yo no quería contarte...
Pero no me parece bien que no te lo diga.
María... ella me lo contó...
...yo no debería hablarte...
...pero ella me lo contó. - Que está embarazada de Tião.
¿Cómo lo sabes?
Cuando tù estás de ida, estoy de vuelta. Sé de todo, vieja.
¿Y no me lo contaste?
¡Si lo acabaste sabiendo!
¡Por mí! Pero yo iba a decírtelo.
Y tù estabas así tan calladito. ¡No vales nada, Octavio!
Tranquilita, abuela.
¡Cuidado con el corazón!
Vamos a ser abuelos, Octavio.
Tu estás poniendo viejo, Octavio.
¿Yo?
- Tù estarás... - ¿Yo?
¡Porque yo estoy muy bien!
Ahí está la complicación.
No te levantes. Quédate ahí.
Calma, estoy aquí.
Estás pálido, viejo. ¿Qué pasó?
Los que gritan ganaron. Habrá huelga general el lunes.
No puede ser. ¡Justo ahora! Será una derrota.
Intentamos. El Presidente del Sindicato se esquivó.
Nos responsabilizó por la huelga. ¡Se lavó las manos!
La Asamblea aprobé. El lunes habrá huelga general.
¡Pero que estupidez!
Nos van a agarrar en pañales. No hay nada preparado. Nada.
Ellos hacen las estupideces y nosotros nos jodemos.
Compañero, vete a casa a descansar. Mañana hablaremos.
¿Cómo están las cosas por ahí?
Tião fué a pasar la noche en la casa de María.
La vieja está hecha un trapo.
Es horrible.
Más que horrible.
¡La puta que lo parió!
Sartini, ¿dónde te metiste el día entero?
No empieces. Fué decisión de la Asamblea y voluntad de la clase.
Voluntad de la clase, un cuerno.
Pero ahora Inés está muerta. Debemos parar todos mañana.
¿Y crees que con esa huelga, así de golpe, vamos a conseguir algo?
Compañero, va a haber mucha represión y no estamos preparados para eso.
Será una derrota y quien va a lucrar es el patrón.
¿Represión? ¿Y vamos a vivir así, cagados de miedo?
Vamos a organizar los piquetes en las puertas de las fábricas.
¿Qué piquete? ¿Estás pensando que con un piquete...
...vas a paralizar una clase entera?
¿Estás pensando que estamos en San Bernardo?
No estamos organizados para eso, muchachos.
Ustedes lo precipitaron y lo confunden todo.
¿Piensan que media docena de compañeros de la Santa Marta...
...van a solucionar los problemas de los obreros de 17 mil empresas?
No seas imbécil. Estás con bronca porque fuistes despedido.
¡No es eso! Estoy cabreado con los despidos.
¡Tengo los calzones bien puestos y no voy a aguantar eso!
Octavio, tu actitud es lo que me espanta.
Espero que los rumores que dicen que tu hijo me anduvo denunciando...
...no influyan en tu actitud.
¡No seas imbécil!
Compañeros...
Todos saben que los patrones esparcen esos rumores...
...para dividirnos y desmoralizarnos.
No es por culpa de un imbécil de esos...
Espera, aquí no vale la cuestión personal.
Vamos a tomar un trago y a discutir con calma.
Eso no es una cuestión personal...
¡Es una cuestión política!
Me voy a acostar.
María, cierra la casa bien.
No necesitas dormir aquí. Gracias, no es necesario.
Mañana hay que trabajar. Vete a descansar a tu casa.
No, por mí no hay problemas.
Es mejor, Tião. Hoy te despertaste muy mal.
Está bien.
Vete a dormir también, Bié. Ya es tarde.
Obedece a mamá.
¿Qué vas a hacer mañana?
Daré una manito a ellos, una siempre pude ayudar.
María, mañana no sales de casa. ¿Me estás oyendo?
Te estoy pediendo. No, te estoy mandando.
No te metas en la huelga. Sé que no vas a trabajar.
No quiero ver a mi mujer metida en esa vaina. Ellos van a reprimir.
¿Qué es eso, Tião? ¿Por qué das órdenes?
Voy a ayudar a los muchachos. ¡Claro que voy!
Haz lo que te estoy diciendo, María.
Sino me enojo contigo.
Quien se enoja soy yo.
Sin esa cosa de mandar, ¿eh?
Hago lo que me parece bien. No estoy haciendo nada malo.
Caray, ya te lo dije.
- Pero el problema es tuyo. - ¡Sí, es mío!
¿Estás buscando broncas?
¡Bronca, un cuerno!
¿Todo el mundo está loco? ¿Todos perdieron la cabeza?
María, no me críes más problemas. ¡Por Dios!
Vete a casa, Tião, y habla con tu padre...
...y a ver si mañana no haces tonterías.
¿Qué sucedió? Te despertaste temprano.
Ud. también madrugó.
Tengo mucho trabajo, hijo.
¿No vas a esperar a tu padre?
No, porque él se pone muy nervioso cuando hay huelga.
Yo no quiero que haya discusión.
- ¿Vas a hacer piquetes? - ¿Qué?
¿Vas a hacer piquete de huelga?
No, para eso hay bastante gente.
No te hagas de valiente si llega la policía, ¿eh?
Yo sé lo que hago. No te preocupes.
¿Estás con la dirección?
De aquí. Si te sucede algo, pronto lo sabremos.
Que tontería, mamá.
- ¿Tienes la dirección o no? - Está aquí, en la cartera.
Vete con Dios, hijo.
Vuelvo pronto, mamá.
¿Dónde están los calzoncillos limpios?
Debajo de la pila de ropa, ahí.
- Tu vives guardando las cosas. - Tu suerte es que los haya lavado.
¡Vamos, mocoso, levántate!
¡Ya es la hora, levántate!
Me estoy despertando... Calma, ya voy.
Caray, dormí demasiado.
Todavía es temprano.
Yo ya debía estar en la fábrica. ¿Está listo el desayuno?
Está bien calentito.
No dejes que Chiquiño llegue atrasado. Fué descontado 3 veces.
Ya lo llamé.
Pero aùn es temprano. Voy a dejarlo dormir un poquito más.
¿Y Tião?
Ya se fué.
No me esperó.
Tião me va a dar dolor de cabeza.
No, no quiero pan.
El café está mal hecho.
Deja de lujo, hombre.
La suerte es que está caliente. Uno ni siente el gusto.
Si la policía llega, tù te alejas.
- No te hagas el valiente allá. - No necesitas preocuparte.
¿Estás con la dirección?
De aquí. Si te sucede alguna cosa lo sabremos pronto.
¿Pero qué es eso, Romana?
- ¿Tienes la dirección o no? - Sí, la tengo.
Pero deja de pensar tonterías.
Vete con Dios.
No dejes que él llegue atrasado, ¿eh?
Levántate, ya es la hora.
Ya me voy, madre.
- Ya me voy. - Que pereza. Niño, sal de ahí.
¡Porquería! ¡Un día de estos yo también hago huelga!
No me gusta este dos de espadas.
¿Qué pasó, mamá?
¿Aùn no estás listo? Si llegas atrasado, te doy una paliza.
- ¿Estás echando las cartas? - ¿No estás viendo?
- ¿Estás preocupada con algo, madre? - ¡Vete a lavar!
- ¿Es por culpa de la huelga? - ¡No te metas!
¿Qué dice ahí?
Si no te arreglas pronto, te rompo la cabeza.
Que sea lo que Dios quiera.
Circulando. Vamos. Circulando.
Ustedes también, por favor.
Nadie debe entrar en la fábrica. Todos para el estádio.
Los patrones sólo entienden cuando paramos.
Todos juntos, unidos, nadie va a trabajar.
¡Huelga! ¡Huelga!
Trabajadores unidos, jamás serán vencidos!
Trabajadores unidos, jamás serán vencidos!
Ya pararon más de la mitad de las fábricas...
Y nosotros no vamos a romper la huelga.
¡Huelga general! ¡Muchacho!
Te pareces a la policía. Tenemos que dialogar.
Mira, Octavio, son unos mierdas. ¡Carneros!
Es la huelga general, carajo. ¡Todos para el estádio!
¡Todos para el estádio! ¡Nadie entra!
¡Todos para el estádio! ¡Nadie entra en la fábrica!
¡Espera, Tião! ¿Adónde vás?
Tù eres el hijo de Octavio. No me digas que vas a hacer eso.
La huelga es la defensa de un derecho, y yo no tengo ganas de defenderlo.
El que quiera trabajar que trabaje. ¡Guardia!
Guardia, yo quiero trabajar.
Mira, Octavio.
¡Quizás fué aquel maricón que me denunció!
El que quiera entrar que entre. Es la democracia, ¿no?
Vayan entrando, no tengan miedo de ellos.
Esta huelga acabó antes de comenzar.
Compañeros, la huelga es nuestra arma de lucha.
Es de nuestras manos que sale la riqueza...
Y nosotros que la producimos vivimos en la miseria.
La huelga es un derecho sagrado del trabajador.
Compañero, no entres. No vayas a entrar.
¡Lárgate, Braulio!
¡Carajo, que violencia absurda!
¡Es así que tratan al obrero brasileño!
Tranquila, Silene.
Ellos no pueden obligarme a entrar.
Vamos a luchar, a defender nuestros derechos.
María, estoy asustada. Mira, me oriné.
Vete al bar a secarte.
- ¡Me estoy muriendo de miedo! - ¿Y quién no lo está?
- ¿Te secaste? - ¡Que vergüenza!
No, la cosa se está poniendo pesada.
¿Qué hacen? Vamos al estádio. Va a comenzar la Asamblea.
¡O entran para trabajar o se marchan!
- ¡Saca la mano, maricón! - ¡Vete a trabajar, puta!
¡Estoy sangrando, Silene! El niño... estoy sangrando...
Tião, teléfono para ti. Es urgente.
Corre, traidor hijo de puta. Corre.
¡Delator! ¡Agárrenlo! ¡Miserable! ¡Sinvergüenza!
¡Déjalo! El no es nuestro enemigo.
Nuestro enemigo es quien nos explota.
Nuestro enemigo es la represión que nos oprime.
¡Levántate, Tião, anda!
¿Y ahora, qué van a hacer?
¿Van a pegarle a todos los que fallaron en la huelga?
Vete a cuidar tu vida. Tenemos mucho que hacer.
Reunión en el Sindicato, reunión en el estádio.
Esto es un motín, ¡carajo!
¿No fueron ustedes que hicieron esta huelga de mierda?
¿Y van a vengarse con ese flojo...
...que no ve a nadie sino a él mismo?
Allá viene la policía. Tranquilo, Braulio, vamos.
¡Ya voy!
¡Ya voy!
¿Qué sucedió?
Está bien, Doña Romana. Podía haber sido peor.
La cosa está fea en la fábrica. Le pegaron a ella.
Pero el médico dijo que está bien.
- Ven a la cama. - Perdone que haya venido aquí.
No quería asustar a mi madre.
Hiciste bien. Ven a la cama, apóyate en mí.
Una muchacha que vino acá... Estaba herida, de la fábrica...
- Parece que... pérdida de sangre... - Sí, lo sé.
- El niño... parece que lo perdió... - ¿María?
Ella se marchó hace 15 minutos.
- ¿Entonces... no fué grave? - No puedo informar sobre eso.
- ¿Y adónde se fué? - ¿Como voy a saberlo?
¿Había alguien con ella?
Un hombre y dos muchachas la trajeron hasta aquí.
Quien está necesitando de cuidados eres tù, ¿no?
¿Han arrestado a Octavio? ¿Y me lo dices ahora?
Bueno... Me mandaron a avisarle...
¿Dónde está?
No se preocupe, señora. El tiene abogado.
Ya organizaron todo, él saldrá pronto.
¡Un cuerno! ¿Mi marido preso y yo me voy a quedar aquí? ¿Dónde está?
No sé. Creo que está en el DOPS.
¿En el DOPS? ¡Ay, Virgen santa!
¡Dios mío, madre mía!
Cristo...
En el DOPS...
- ¡Yo voy para allá! - No vale la pena.
Nuestros compañeros van a soltarlo.
¿Quiénes? ¿Yo soy su mujer o no?
Con mi marido preso, ¿quién cuidará de aquí?
Ya pasó 3 años en aquella cárcel...
Esta vez hago un escándalo, pero lo saco de allá.
Los niños vinieron a coger la pelota y pisaron en la ropa.
Si agarro a ese desgraciado, le tuerzo el pescuezo.
Ayùdame. Coge esa ropa y enjuágala.
Pon los frijoles e el arroz en el fuego porque yo voy a la policía.
Arrestaron a Octavio.
Arregla todo. Yo lo diré a Cándida que estás aquí.
Después te doy dinero para que salgas con Chiquiño.
Vamos, hija.
Tenemos que encontrar a Braulio. Quédate aquí y cuídala a María.
DOPS... ¡Quizás ya lo molieron a patadas!
¡Viven arrestando al Sr. Octavio!
Silene, yo estoy bien. Si tù quieres, ya puedes irte.
Me voy a quedar contigo.
Pero estoy con un dolor de cabeza...
Acuéstate aquí.
Acuéstate.
¡Qué escándalo! ¿Qué sucedió contigo?
- ¿Y María? - Está en el cuarto de tu madre.
Ella también se lastimó.
- ¿Estás ahí? - ¿Qué sucedió?
El está preguntando que sucedió.
Déjame ir. Yo no tengo estómago.
Mira, niña, vete a la mierda.
¡No te metas, que tù no sabes nada!
Yo estoy en tu casa porque tu madre quiso...
No hables así con Silene.
Espera, vamos a tener calma.
Vamos a tener calma todos. Perdona, Silene.
Estoy allá dentro, María.
¿Qué sucedió, ángel mío?
¡Quita la mano! ¡Angel un carajo!
¡Jodida, aguantando puñetazos en la panza, eso es lo que soy!
¡No tengo nada de ángel!
¿Qué te sucedió?
¿Qué le sucedió a todos? ¡Eres un gran hijo de puta!
Hubo un masacre en la puerta de la fábrica...
Y tù allá dentro, viendo como zurraban a tu padre...
...sin sangre para reclamar, para reaccionar, carajo.
Yo no quería que fueses un héroe, yo quería que fueses gente.
¿Cuál es tu ideal de vida?
¿Una mujer haciendo una comidita sabrosa?
¿Un niñito estudiando en un buen colegio?
Yo también quiero una vida decente...
...pero no a este precio.
Ellos nos están jodiendo y tù los ayudas a jodernos.
Que vergüenza, Tião.
Vete.
Tu hijo casi ya no existe por culpa de la surra de la policía.
El médico dijo que sólo fué pérdida de sangre, no dañó al feto.
Si nace, él será nieto de Octavio.
Yo tengo vergüenza de decir que es el hijo de Tião.
Estás nerviosa, muchacha. Todo eso son nervios.
Estás medio loca como todo el mundo.
No es eso. Ustedes no ven bien...
Se entregan, hacen tonterías...
Quien lleva ventaja es quien sabe lo que quiere.
¡Vete, Tião! Sin más nada.
Sin compromiso, sin casamiento, sin ninguna mierda.
Que hiciste tonterías, yo ya lo estaba sabiendo...
Pero tu estómago aguanta todo aquello de cabeza baja.
¡Te volviste una mierda!
¡Pégale a mí también!
Pégale a tu madre, a tu padre, a tus compañeros.
Puedes pegarnos, pues aceptas propinas de ellos.
¡Pega más! ¡Pega más!
¡Hicieron escuela esos hijos de puta!
¡Quítame más sangre!
¿Soy yo el que quito sangre?
¡Soltaron al Sr. Octavio! ¡Soltaron al Sr. Octavio!
¡Te pegaron mucho, Octavio!
Te estoy diciendo que no. Yo no sentí nada.
Siéntate. Mira, todo roto...
También Doña Romana hizo una revolución en la policía.
¿Y no era para hacerla? Lo arrestaron por nada.
¿Qué estás haciendo ahí? ¿Viste como salió Sartini?
El está muy loco. Hazme un favor, por Dios.
Anda con él y no dejes que haga tonterías.
No te preocupes. Si sucede cualquier cosa, vengo a avisarte.
Siéntate aquí, Octavio.
¿Por qué debo sentarme? Necesito bañarme.
¿Qué pasa contigo?
Es la primera huelga en que participas, ¿verdad?
Hay muchas cosas que necesitas aprender.
Una se queda viendo TV. Hay más emoción en la calle.
¡Y como!
¿Romana, hay café?
No, estate quieta. Atiende a los compañeros.
¿De qué vale esconderse en el patio?
Estaba esperando.
Quiero hablar con Ud.
Escucha, creo que tenemos pocas cosas para conversar.
De mi parte, yo quiero decirte...
...que estoy muy sorprendido, que me engañé...
Quiero que tomes tu rumbo...
...el rumbo que escogiste.
Porque esta no es...
...y nunca será la casa de un rompe-huelgas.
Yo sólo quería decir que no fué por cobardía.
Quizás no.
Tuviste valor.
Faltaste haciendo mitín,
no hiciste ningùn secreto.
Como Jesuíno, que intentó encender una vela a Dios...
...y otra al diablo.
¡Tù eres mucho peor!
No eres un traidor por cobardía...
¡Eres un traidor por convicción!
Mire, yo no soy ningùn hijo de puta.
Me gustan los amigos, pero preferí tener su desprecio...
...a ver a mi mujer y a mi madre sufrir como todos aquí.
Está bien.
En el fondo la culpa no es solamente tuya.
¡Yo tuve la culpa!
Ninguna culpa, papá.
¿Culpa de qué? ¡Carajo!
Y déjame creer eso sino voy a sufrir mucho más.
Voy a creer que mi hijo solito cayó en la mierda.
Voy a pensar que mi hijo es un canalla de nacimiento.
Mira, muchacho...
No tenemos más que hablar.
Esta casa ya no es tuya.
Tù elegiste, tienes ese derecho.
- Buena suerte. - No fué por cobardía...
...y no me arrepiento de nada.
Tu madre quizás quiera hablar contigo.
Hasta un día de estos.
Uds. están confundidos, con la cabeza dada vuelta.
No fué por cobardía. No me arrepiento de nada.
Lo sé. Tù no eres un cobarde.
Eres muy terco, ¿verdad?
¿Adónde vas?
A la casa de un amigo.
Vive en Diadema.
¿Te vas a quedar allá?
¿El tampoco hizo huelga?
No lo sé.
Sólo sé que es mi amigo. Vive con la madre.
Voy a ver si cobro mi dinero. No sé si puedo...
Consigo otro empleo.
Yo tengo mi profesión.
Resuelvo mi vida y vengo a buscar a María.
¿Crees que valió la pena?
Lo que está hecho, está.
Hay ropa tuya para lavar. Otro día mandas a buscarla.
Está bien.
Eres terrible, madre.
Hijo, verás que es mejor pasar hambre entre amigos...
...que pasar hambre entre extraños.
Puede ser.
Necesito intentarlo.
¿Sabes una cosa, mamá?
Todavía gano esa partida.
Hijo, dame un abrazo.
Que Dios te acompañe.
¿Estás con nuestra dirección en el bolsillo?
Si te sucede alguna cosa, lo sabremos pronto.
Si no fueses tù, yo diría que estaba dando mala suerte.
Cuídela a María.
Todos vamos a cuidar de ella. Y de tu hijo también.
- ¿Estás viendo? ¿No te lo dije? - Sí, aumentaron los guardias.
¿Y va a quedar así? ¡Hijos de puta!
¿Tù vas a enfrentar las bombas con palos?
Los obreros del turno de la noche no entran!
¡No te calientes, Sartini!
Los trabajadores unidos jamás serán vencidos.
¡La huelga continùa!
No vamos a dejar que nadie entre en esta fábrica.
Es la huelga general, carajo. No vamos a hacer caso de la represión.
¡Despacio, Sartini!
¡Nada de violencia!
Vamos a hacer una cadena allá en la puerta.
¡Hoy nadie entra en esa fábrica!
¡Tranquilos!!Nada de violencia!
¡Vamos a marcharnos!
¡Eso nunca!
¡Vámonos, muchachos!
¡***! ¡***!
¡Vamos para casa!
¡No vamos a aceptar la provocación!
Nunca un compañero maravilloso como ese iba a pensar que...
...había tanta gente importante en su entierro.
¡Solamente el propio Braulio!
¿Viste, Chiquiño? Un día...
...tu hijo va a estudiar a Braulio en la Historia del Brasil.
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